El 20 de noviembre se conmemora el aniversario de la aprobación de la Convención de la ONU sobre los Derechos del Niño y del Adolescente (1989), celebrado en todo el mundo como Día Mundial de los Derechos de la Infancia. En esta fecha, instituciones y comunidades organizan actos para sensibilizar sobre la importancia de garantizar salud, educación, protección y participación a todos los niños y niñas, estén donde estén.
En las Islas Canarias, esta efeméride adquiere un papel de primer plano, gracias también a la red de UNICEF “Ciudades Amigas de la Infancia”. Canarias celebra tradicionalmente el 20 de noviembre con diversas actividades dirigidas a niños, niñas y adolescentes, a menudo distribuidas a lo largo de todo el “Mes de la Infancia”. Por ejemplo, Puerto del Rosario (Fuerteventura) organizó en 2025 un completo programa de tres jornadas: el 20 de noviembre, el alumnado de un colegio de primaria presentó un “manifiesto mágico” escrito por ellos sobre el derecho a la protección, durante un acto institucional, y por la tarde se celebró un Pleno Infantil del Ayuntamiento retransmitido en directo, en el que los jóvenes concejales pudieron exponer ideas y propuestas para su municipio. Esta sesión incluyó temas clave como el balance anual, proyectos participativos y un turno de preguntas libres a los responsables políticos, ofreciendo a los niños y niñas una oportunidad real de participar en la vida cívica.
Al día siguiente, 21 de noviembre, también en Puerto del Rosario tuvo lugar “El circo de los derechos”, una tarde de juegos, talleres y espectáculos de circo en la plaza, pensada para que familias y menores disfrutasen juntos y, simbólicamente, para “dejar que la infancia se apropie del espacio público con alegría”. El alcalde animó a todas las familias a participar, recordando “lo esencial que es escuchar, proteger y ofrecer espacios reales de participación” a los más jóvenes.
En Canarias tampoco han faltado proyectos originales para celebrar el Mes de la Infancia. En Los Realejos (Tenerife), por ejemplo, alrededor de 50 personas de entre 12 y 90 años –miembros del Consejo Municipal de la Infancia y la Adolescencia junto con grupos de personas mayores– subieron al escenario para la obra teatral “Huellas”, que unió generaciones. Esta representación intergeneracional, estrenada el 8 de noviembre de 2025 con gran éxito de público, entrelazó memoria y modernidad: invitó a reflexionar sobre las tradiciones locales y las nuevas formas de comunicación digital, demostrando que “cultura, memoria y participación no tienen edad”. La iniciativa, impulsada por la concejalía de Infancia del ayuntamiento, fue un “puente entre pasado, presente y futuro” que implicó y emocionó a jóvenes y mayores, celebrando de forma creativa el Mes de la Infancia.
En el plano institucional, el Ayuntamiento de La Orotava (Tenerife) apostó por la formación: el 7 de noviembre de 2025 organizó una jornada formativa dirigida a unas 30 personas funcionarias municipales para profundizar en los derechos de la infancia y en las estrategias de participación juvenil en las políticas locales. Esta actividad, parte del Plan Municipal de Infancia, pretendía que todos los ámbitos de la administración implicaran a niños, niñas y adolescentes en las decisiones que les afectan, reconociéndoles como “herramienta clave para construir una sociedad más justa, inclusiva y participativa”.
Otro tema que cobró relevancia en 2025 fue el de los derechos digitales de la infancia. El Grupo Asesor UNICEF España –un panel de más de 100 chicas y chicos de todo el país– lanzó para el 20 de noviembre la actividad “¡Enciende tus derechos digitales!” para promover la conciencia sobre los derechos de niños, niñas y adolescentes en la red. En varios municipios, los Consejos de Infancia y Adolescencia pulsaron simbólicamente el “botón ON” para “encender los derechos de los menores en el entorno digital”, reflexionando sobre la privacidad en línea, el ciberacoso, el acceso a la información y formulando propuestas para hacer de Internet un lugar más seguro y adaptado a la infancia. La iniciativa, apoyada por UNICEF y la red Ciudades Amigas de la Infancia, llevó a grupos de niños, niñas y adolescentes a diseñar también un “kit de supervivencia digital” y presentar sus conclusiones a las autoridades locales, pidiendo a las personas adultas compromisos concretos para proteger los derechos digitales. “Participar en esta actividad nos da la oportunidad de reivindicar nuestros derechos y demostrar que nuestra voz cuenta”, subrayó Clara, de 13 años, miembro del grupo de UNICEF.
De las plazas reales a las virtuales, el Día de los Derechos de la Infancia 2025 en Canarias ha combinado fiesta, creatividad y compromiso cívico, con un mensaje claro: los niños, niñas y adolescentes no son solo destinatarios de protección, sino protagonistas activos en la defensa de sus propios derechos, hoy y en el futuro.