De Europa a Asia: los viajes imperdibles en el otoño de 2025​​​​​​​​​​​​​​​​

Scritto il 06/10/2025
da Caterina Chiarelli

El otoño de 2025 se confirma como una estación muy favorable para el turismo internacional, con un crecimiento constante en los flujos turísticos y la aparición de numerosos destinos emergentes que conquistan a viajeros en busca de experiencias originales y de calidad. La demanda global de turismo continúa expandiéndose, sostenida por una mayor flexibilidad en las formas de viajar y por la recuperación casi completa de los niveles prepandemia, con una oferta rica en propuestas entre naturaleza, cultura y relax en contextos menos masificados.

En Europa, el período otoñal regala paisajes sugerentes y una calidad de la experiencia decididamente superior respecto a los meses estivales, a menudo caracterizados por un turismo de masas más caótico. Los destinos tradicionales como París, Roma o Barcelona siguen siendo destinos amados, pero se registra un creciente interés por localidades menos trilladas: Dubrovnik en Croacia encanta con su mar aún tibio y las antiguas murallas asomadas a un Adriático de colores otoñales; Puglia, con sus pueblos rurales, las tradiciones gastronómicas y las costas reconocidas como entre las más bellas del Mediterráneo, es un verdadero paraíso para quien busca un turismo lento y auténtico. La costa portuguesa se señala como un área en fuerte ascenso, apreciada por la combinación entre playas salvajes, cultura local y una relación calidad-precio ventajosa. También los Alpes y los Pirineos atraen un turismo atento a la naturaleza, ofreciendo trekking y paisajes pintados con los colores típicos de la estación, mientras ciudades como Viena, Praga o Budapest se enriquecen con festivales y manifestaciones culturales ligadas al otoño, haciendo la estancia aún más envolvente.

En Asia el otoño representa una estación particularmente fascinante y rica en eventos culturales. Japón domina la escena con sus célebres y espectaculares colores del follaje otoñal, que transforman Kioto y Nikko en teatros naturales de contrastes extraordinarios, acompañados por festivales típicos que permiten una inmersión profunda en las tradiciones locales. Al sur, en la región del Norte de Tailandia, Chiang Mai ofrece un clima fresco y un paisaje exuberante ideal para excursiones entre templos y parques naturales. Corea del Sur propone análogos escenarios otoñales con ciudades y áreas montañosas perfectas para excursiones y una cocina estacional muy buscada, mientras algunas áreas menos frecuentadas del Noreste indio comienzan a ganar atención por su encanto montañoso y cultura étnica.

En el continente americano, el otoño austral corresponde a la primavera, un período perfecto para explorar territorios como la Patagonia o Chile, donde se pueden observar paisajes naturales regenerados y menos frecuentados por la ola turística. En Estados Unidos, sobre todo Nueva Inglaterra atrae a miles de visitantes gracias al famoso follaje otoñal, con bosques que se tiñen de rojo, naranja y amarillo, creando ambientaciones muy fotogénicas y sugerentes. Ciudades como Nueva York o Chicago mantienen una oferta cultural intensa, con festivales de música, arte y gastronomía, disfrutables también en esta estación menos masificada respecto al verano.

Para quienes prefieren destinos de clima más cálido, el otoño es el momento perfecto para visitar Hawái o Dubái. Hawái ofrece playas de ensueño y naturaleza virgen, ideales también para quien busca actividades deportivas o relax total. Dubái propone una mezcla única de modernidad y tradición con temperaturas más suaves y una amplísima gama de eventos, compras y diversiones enmarcados en un contexto extremadamente seguro y eficiente.

También algunos destinos emergentes están ganando atención gracias a su oferta auténtica y a la posibilidad de descubrir culturas menos exploradas. Naha, en el archipiélago de Okinawa (Japón), es un ejemplo de perfecta mezcla entre naturaleza y cultura, con playas espléndidas y una vida urbana vibrante pero no caótica. Las Islas Canarias se afirman cada vez más como refugio otoñal con clima suave todo el año, escenarios volcánicos únicos y una tradición artesanal viva y arraigada. Marrakech, en Marruecos, contemporáneamente, se propone como puerta de acceso al Norte de África con sus zocos coloridos, los sabores intensos y temperaturas aún agradables, ofreciendo una experiencia de viaje intensa y multisensorial fuera de los circuitos más transitados.

Desde el punto de vista del mercado global, las previsiones para 2025 indican un ulterior aumento del turismo internacional, con un crecimiento estimado entre el 3 y el 5% de las llegadas, e importantes resultados en áreas como Asia-Pacífico, Medio Oriente y África. Europa mantiene una posición de relieve, e Italia, en particular, se confirma entre los primeros destinos mundiales tanto por la calidad de la oferta como por el gasto de los visitantes internacionales. Los datos señalan además un aumento creciente de los viajes que combinan trabajo y ocio (“blended travel”), un fenómeno que contribuye a incrementar la variedad y la demanda de experiencias turísticas de calidad.

En conclusión, el otoño de 2025 se abre como una estación rica en oportunidades para viajar de modo consciente y original, eligiendo entre una vasta gama de destinos que unen belleza natural, riqueza cultural y tranquilidad. Ya se trate de bosques encendidos por el follaje otoñal, pueblos italianos poco frecuentados, increíbles paisajes naturales o vibrantes ciudades asiáticas, el viaje en otoño permite vivir momentos intensos y auténticos, lejos de las multitudes y en sintonía con el territorio. Viajar en esta estación significa elegir un turismo de calidad, sostenible y respetuoso, perfecto para descubrir el mundo bajo una luz nueva y fascinante.​​​​​​​​​​​​​​​​